
Nueve niños reciben los sacramentos de la Primera Comunión y la Confirmación tras formación en la Capilla San Benito Abad del CUSEP
Ciudad Colonial, Santo Domingo – 18 de mayo de 2025
En un ambiente de recogimiento, fe y alegría, la Catedral Castrense Santa Bárbara fue el escenario de una significativa ceremonia religiosa en la que nueve niños, entre ellos hijos de miembros del Cuerpo de Seguridad Presidencial (CUSEP), recibieron los sacramentos de la Primera Comunión y la Confirmación, tras culminar exitosamente su proceso de formación espiritual.
La ceremonia, que tuvo lugar el pasado domingo 18 de mayo, marcó un momento trascendental en la vida cristiana de los niños, quienes durante varias semanas participaron activamente en el programa de catequesis impartido en la Capilla San Benito Abad del CUSEP, un espacio destinado no solo a la oración, sino también al fortalecimiento de los valores espirituales en la comunidad que conforma esta institución.
El acto litúrgico fue presidido por autoridades eclesiásticas castrenses, en presencia de padres, familiares, personal del CUSEP y miembros de la comunidad de la Capilla San Benito Abad, quienes se congregaron con entusiasmo para acompañar a los niños en este importante paso en su camino de fe.
Durante la homilía, se resaltó el valor de la educación espiritual desde la niñez y el compromiso que implica recibir los sacramentos, especialmente en el contexto actual, donde se hace vital fomentar principios de amor, respeto y responsabilidad. Asimismo, se agradeció a los catequistas y colaboradores del programa por su entrega y dedicación en la formación de los pequeños.
La Primera Comunión, como uno de los siete sacramentos de la Iglesia Católica, representa el momento en que los niños reciben por primera vez el cuerpo y la sangre de Cristo a través de la Eucaristía, mientras que la Confirmación fortalece su fe mediante la acción del Espíritu Santo, consolidando su compromiso como miembros activos de la Iglesia.
La Capilla San Benito Abad, ubicada en las instalaciones del CUSEP, se ha convertido en un espacio significativo para el desarrollo espiritual de sus miembros y sus familias, sirviendo como puente entre la vida institucional y la vivencia cristiana. Con este tipo de iniciativas, la institución reafirma su compromiso no solo con la seguridad, sino también con la formación integral de sus miembros.
Al concluir la ceremonia, los niños y sus familias participaron de un momento de confraternidad, compartiendo juntos la alegría de este día memorable que marca el inicio de una nueva etapa en su camino cristiano.
















